En la red se habla de múltiples especulaciones sobre la autoría de los recientes atentados en la Maratón de Boston. Muchas son las dudas que apuntan a los servicios de inteligencia u oficinas federales estadounidenses. Algo descabellado a los ojos del ciudadano de a pié, ya que, ¿Cómo podrían las instituciones instigar y crear terroristas? ¿Qué hay de misterioso tras los atentados de Boston si ya se conocen los autores y motivos del atentado?
¿Podría el FBI crear atentados?
En EE.UU. continúan las investigaciones sobre la existencia de vínculos de los autores del atentado de Boston con sectores radicales. Paralelamente muchos se preguntan cuál fue el rol del FBI, cuando oficialmente se sabe que uno de los sospechosos estuvo bajo el escrutinio de lesa agencia.
Las investigaciones indican que el FBI habría tenido conocimiento de las actividades de Tamerlan Tsarnaev, el mayor de los hermanos sospechosos del hecho.
Según el autor del libro: “La Fabrica del Terror” y columnista de “Mother Jones” el FBI habría decidido dejar de seguir a Tsarnaev y enfocarse en una operación encubierta sobre otro sospechoso con planes de estrellar un avión a control remoto contra el capitolio.
Rezwan Ferdaus recibió dinero del FBI para comprar un avión Sabre F-86 en miniatura, le entregaron 25 libras de explosivos C-4, tres granadas y seis rifles AK-47. El sospechoso fue arrestado y acusado de planear un acto terrorista. Este experto en inteligencia dice que estos hechos son comunes.
En otro caso ocurrido en Washington en febrero de 2012 el marroquí Amine el Khalafi fue arrestado en este estacionamiento, cuando iba a recibir armas y chaleco con explosivos de supuestos militantes de Al-Qaeda, quienes en realidad eran agentes encubiertos del FBI que durante más de un año habrían convencido a El Khalafi, para la misión de estallar el capitolio.
Durante los últimos veinte años fueron muchos los casos en los que el propio FBI ha reportado su participación en operaciones encubiertas. A esta altura, es lógico preguntarse: Por qué esta agencia del gobierno, estaría interesada en instigar y fabricar terroristas.
El liderazgo del comité de Seguridad Nacional del Senado está exigiendo una relación completa del FBI en los hechos de Boston.
«Ante nuestros ojos»
Los misterios del Maratón de Boston
Dos semanas después de los atentados de Boston, las autoridades estadounidenses siguen destilando uno a uno los indicios que dicen haber ido encontrando. Todo gira alrededor del origen checheno de los «culpables» y de las conclusiones que habría que sacar de ese factor. Mientras tanto, los internautas y la prensa rusa han sacado a la luz una historia diferente, en la que el «culpable» principal es un agente de la CIA.


Dos semanas después del atentado de Boston, perpetrado el 15 de abril de 2013 a las 14 horas 49 minutos, las autoridades estadounidenses atribuyen la responsabilidad de ese hecho a los hermanos Tamerlán y Dzhokar Tsarnaev. Dicen haber matado a Tamerlán, el mayor de los dos, y haber arrestado a su hermano menor y cómplice. Este último, de sólo 19 años, está supuestamente hospitalizado y debido a sus heridas parece que sólo puede expresarse por movimientos de la cabeza. Así todo, se nos dice que ya reconoció los hechos que se le imputan a él y a su hermano mayor.
Nada se ha aclarado sobre las circunstancias que rodearon la muerte de Tamerlán y, posteriormente, la captura de Dzhokhar. Parece que los hermanos se vieron afectados por el «síndrome de Oswald», que los llevó a destacarse de la muchedumbre anónima asesinando, sin razón ni testigos, a un policía de la universidad. Después se apoderaron de un Mercedes y retuvieron a su anónimo chófer, al que obligaron a retirar 800 dólares en un cajero automático. Y fue al parecer esa persona quien indicó a la policía que los dos hermanos habían dicho en su presencia que eran ellos los autores del doble atentado contra el Maratón de Boston. Seguir leyendo